En
un artículo del 16 de marzo, Marija Petkova, de la cadena Al Jazeera, se
refirió a posibles casos de Covid-19 en el área de Siria bajo control del
régimen de Al Assad. El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, por su
parte, informa sobre episodios relacionados al virus en ciudades como Tartús,
Damasco, Homs y Latakia, así como también sobre la orden impartida por el
gobierno sirio de prohibir cualquier tipo de discusión pública sobre el tema.
No asombra que, una vez más, se quiera callar la verdad respecto de la
seguridad y de la salud de las personas: estamos hablando de un régimen asesino
que, con sus aliados, sigue matando y destruyendo impunemente. Además casi la mitad
del sistema sanitario fue destruido y millones de personas viven en pésimas
condiciones en calidad de refugiadas dentro del país. Esto para no hablar de la
situación de las cárceles, documentada en varias ocasiones a través de informes
y denuncias. En este contexto es normal preocuparse por la posible propagación
de esta enfermedad.
L.P.
23-03-20