
Estos riesgos contra la gente común se
cruzan y se entremezclan dramáticamente. En mayo, Giovanni López –un humilde
trabajador de Jalisco– fue detenido por la policía por no usar barbijo y
terminó asesinado en la comisaría. El hermano dio a conocer el caso impulsado
por las movilizaciones por George Floyd en EE.UU. Se sucedieron importantes
protestas en diversas ciudades mexicanas, en donde los manifestantes debían
hacer frente a las intimidaciones de la policía y de agentes encubiertos que
amenazaban con desaparecerlos. Estas valientes reacciones en defensa de la
vida, sobre todo protagonizadas por la juventud, son fundamentales para impedir
que la violencia narco-estatal continúe normalizándose y podrán crecer si toman un camino cada vez más independiente de la narcodemocracia mexicana.
I. R.
02/07/20