Contra las mentiras de internet (y de la IA)

Por Jacopo Andreoni

Eliot Higgins, fundador del sitio norteamericano de noticias sensacionalistas llamado Bellingcat, pensaba que estaba haciendo una broma. Sin embargo las imágenes que tuiteó fueron compartidas por cinco millones de personas, de verdad convencidas de que Donald Trump había sido arrestado violentamente por la policía, arrojado a la cárcel e inmortalizado con la ropa naranja de los reclusos. Quizás hubiera sido una linda noticia pero evidentemente se trataban de fotos falsas producidas por una inteligencia artificial que había respondido, de esta forma, al input de Higgins de generar imágenes que representasen el arresto del ex-presidente.

Fue The Washington Post el que puso en evidencia el problema pero, para nosotras/os, la cuestión va más allá: ¿cómo será posible, en esta época de desinformación algorítmica, distinguir lo falso de lo verdadero? Si es cierto, como efectivamente lo es, que la historia de los poderes opresivos es la historia de falsificaciones monumentales, también lo es (y esto es muy problemático) que, hoy, esta capacidad de mentir, de decir cosas que no son y de crear pruebas falsas está sustancialmente en todas las portadas y se difunde masivamente por las redes sociales, por internet, por las plataformas de noticias y por las telarañas de la cyber-mentira.

Por eso, hoy más que nunca, es indispensable elegir bien las fuentes, humanas en primer lugar, tratar de elegir activamente cómo y de dónde informarse, por quiénes y por qué, sustrayéndose del abrumador poder negativo de las tecnologías digitales, con el fin de buscar en común una posible verdad libre (y que libere).

Publicado en La Comune Online